miércoles, 20 de julio de 2011

¿Inferior? No lo creo.

No necesito casi nada para seguir adelante, solo confianza en mi misma. Saber lo que quiero hacer y lo que debo hacer. Guiarme por el corazón y la intuición en vez de por el cerebro y la inteligencia. No sabré bien al final del camino lo que está bien y lo que está mal, no me importa para nada. Y si no me importa a mí, menos debería importarte a ti. Si no me crees, no es mi problema sino tuyo. Tengo mis creencias y tengo mis relevancias hacia lo desconocido. Quiero gritarle al firmamento que por que me ha hecho esto. No es siempre fácil, pero estaré aquí siempre. Lo intentaré con todas mis fuerzas, quiero salir adelante por mucho que me cueste o independientemente del tiempo que me cueste. Solo quiero lograrlo, lograr mis propósitos. Llegar a ser alguien con quien esté agusto yo, no tú. Un año puede acabar o empezar, pero nunca volver. Podrás recordar partes felices y tristes de él. Dolorosas o indoloras, pero siempre las mantendrás. Creerse superior a alguien, es el primer síntoma de inferioridad.

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