Objetivos.

Es bueno cuando alguien recuerda pequeños detalles sobre ti. No porque los sigas recordando, sino porque se preocupan en realidad. Aunque crea que todo el mundo me odie en el fondo, no me importa. Lo importante es que yo sigo con la cabeza bien alta y sonriendo. Quién sabe, a lo mejor eso me ayuda para encontrarme a mí misma. No es algo malo si quiero llorar por las noches cuando todo el mundo está durmiendo, no es tan malo si sabes porque lo haces y de que manera. Llorar por llorar sólo te hará caer más bajo y hundirte más no es lo que actualmente más necesitamos. No voy a seguir oyendo disculpas que no valen nada y no quiero seguir viendo todos los días la misma sonrisa falsa en tú cara. Algún momento me iré, les miraré a los ojos y les diré firmemente: ''Gracias por nada, pero nada va a cambiar.'' Sí, podré echar de menos toda mi anterior vida, pero no volveré. ¿De que me serviría? Me serviría para que todos se dieran cuenta de que no soy capaz de seguir adelante sin ellos, de que no soy lo suficiente fuerte como para cuidarme por mí misma. Necesito confianza y algo más de cordura, pero qué más da, a nadie le importa lo que yo piense. A nadie nunca le ha importado y no iba a empezar a importar ahora. Deja de preguntarme por mi futuro, ni yo lo sé. La única cosa que tengo clara, son los objetivos.